Hacía mucho tiempo que no salía sólo a la montaña y me daba un poco de pereza porque cuando uno se acostumbra a compartir estas experiencias y disfrutar con la compañía de los magníficos amigos con los que tengo la fortuna de salir pues como que no apetece tanto pero, por otro lado, tenía tiempo (estaba de vacaciones), la previsión del tiempo era buena, tenía macuto para estrenar, tenía "mono" por llevar un mes sin subir y, además, había nieve...., demasiados factores para ignorar así que a última hora del domingo me decido a salir.

Elijo una ruta sencilla de una cumbre que, a pesar de ser clásica y conocida, no había hecho nunca, Montón de Trigo, aunque me lo había propuesto en varias ocasiones.



Según la información que proporciona MIDE es una ruta de tipo medio en todo.

Me levanté tempranito y salí desde las Dehesas de Cercedilla a eso de las 9:00h más o menos, subí hasta el Puerto de la Fuenfria por la calzada romana (auténtica) que he conocido este año y que es mucho más agradable que la más popularmente conocida. Había bastante nieve aunque sólo tuve algún problemilla (de nieve hasta "las trancas") al final, justo antes de llegar al Puerto.

Una vez allí, ni que decir tiene que siendo lunes y tempranito no encontré a nadie, vi que había posibilidad de ponerme las raquetas y me las calcé; reconozco que más que nada por las ganas que tenía de estrenarlas después de llevar un año nuevas en su funda porque aunque no molestaban tampoco se andaba mal sin ellas.

Y no hice muchas fotos, pero hubo un momento en el que vi una figura subiendo también a Montón de Trigo y la escena me gustó. Influido por el libro que estoy leyendo ("Los conquistadores de lo inutil", regalo de Papá Noel sabiamente aconsejado por Félix), me "trasladé en el espacio" y me vi subiendo algún "tres mil y mucho" de Chamonix...

En la foto de la izquierda se ve el destino, Montón de Trigo, y en la de la derecha un zoom a la cima en la que se ve al montañero que subía y cuya huella seguí, en vez de la ruta transitada.



Esta subida fue muy divertida. Algo antes de la mitad tuve que quitarme las raquetas pues la nieve ya estaba más dura y de hecho, según qué tramo tuve que tener cuidado con el hielo. El seguir la huella que había visto también "tuvo su aquel" pues me metí en algún "berenjenal" de nieve hasta la cadera, menos mal que pude salir sin mucho problema.

Pero como digo, con todo, fue muy divertido. Una vez en la cumbre tampoco había nadie ya y pude estar un ratillo contemplando las fabulosas vistas que el día y la montaña me ofrecían:



Mirando de izquierda a derecha y de arriba a abajo: Vista al Suroeste: Gredos al fondo, primer plan de Siete Picos y La Maliciosa, Bola del Mundo y "Las Cabezas" y, por último Peñalara.

Pero claro, también se observa la civilización:


Segovia es la ciudad que se ve a la izquierda (tirando de zoom, claro y reconozco que me ha sorprendido) y a la derecha las "Torres de Mordor" que son ya ominpresentes en el horizonte de Madrid.

Desde allí replanteé qué hacer e improvisé una vuelta diferente... Sí, ya sé que eso no se debe hacer yendo sólo, pero la verdad es que lo vi claro, ya había hecho antes algo parecido y en el GPS veía claramente el camino que debía seguir, así que fui haci Peña Bercial, desde allí al Collado de Marichiva y ya directos de vuelta a las Dehesas.

Y bueno ya para acabar por aquello del "yo estuve allí"....



Primer plano en la Cima de Montón de Trigo y a la derecha ya en el aparcamiento.

Bueno, pues eso que salió una ruta cortita pero muy entretenida en un magnífico día de montaña (otro más).

Nota: He estrenado el macuto que me trajo Papá Noel sabiamente aconsejado por Félix y ha sido una gozada, en todos lo sentidos es un macuto magnífico. Gracias Félix.

Sigo actualizando el log, en esta ocasión con una ruta diferente. Salíamos Félix y yo sólos y nos fuimos por una zona que él frecuenta poco y que curiosamente yo más pateaba cuando salía en solitario.


La planteábamos como una ruta tranquila, fundamentalmente dedicada al geocaching y nos salieron algo más de 21 Km (con razón tardamos tanto). Según las estadísticas de MIDE:

Comenzamos la ruta en el Alto de Los Leones (sí, ya sé que su nombre real es en singular pero es que...., son tantos años...). Cogiendo al principio la pista (carretera en desuso) que lleva a Peguerinos, en seguida nos cruzamos con el GR-10 que sube hacie el Cerro Piñonero. Desde éste las vistas del Valle de los Caidos son magníficas aunque le neblina, en esta ocasión no me permitió sacar una foto "decente". Un poco más arriba sí pude sacar alguna que me gusta:











Seguimos por el GR-10 y llegamos tras otra subidita a Cabeza Lijar.


Para quien no lo sepa Cabeza Lijar es un bunjer de la Guerra Civil con unas características muy especiales (y quizás por eso se conserva en perfecto estado). Es un casquete esférico con una terraza en la que hay una "rosa de los vientos" hecha con piedras. Su interior despejado se mantiene en perfecto estado (descontando alguna pintada poco afortunada). En esta última visita he visto que han puesto de una manera un tanto "rústica" una puerta que entiendo puede servir para evitar el frio y la nieve. Es uno de los lugares de la Sierra muy especiales para mi de donde tengo magníficos recuerdos... Aquí he dormido, en grupo grande y en grupo reducido, he subido por la noche en medio de una fuerte ventisca, he disfrutado del frio de la mañana en su singular terraza...., en fin, que me encanta.

Seguimos nuestro camino bajando y luego subiendo hasta llegar a "La Salamanca". Es éste otro refugio esta vez de los construidos por ICONA hace muchos, muchos años y que no tiene ya ningún mantenimiento como se ve:

Aunque el tejado está completamente derruido, aguantó el techo lo que hace que la planta sea habitable. Había algo de suciedad (¡ qué lástima! ), pero estaba razonablemente usable.

Es una verdadera pena que todos estos refugios, que fueron magníficos, estén ahora en estado de completo abandono (alguno de ellos ya es sólo un montón de escombros): "La Naranjera", "Valle Enmedio",¿tanto costaría mantenerlos en un estado digno?. En todos ellos he dormido de joven, en la planta baja o bajo cubierta en una curiosa mezcolanza de personas con, al menos, una cosa en común, la afición a la naturaleza.....

Continuamos nuestro camino hacia el Cerro de la Carrasqueta donde teníamos un nuevo caché esperándonos y volvimos. tras recorrer un tramo por el que habíamos venido, decidimos bajar en un punto dado "a trocha" hasta Collado Hornillo para hacer otro caché y ya cogimos la pista (la que llevaba a Peguerinos) pero esta vez en sentido contrario hasta el punto inicial.

Como no hice muchas fotos, he tirado de hemeroteca e incluyo una de las pocas que tengo de mi época adolescente, es en Collado Hornillo y además de que la foto es muy mala (por antigua), ¿alguien me reconoce?.

Bueno, una ruta distinta, no tan montaña, montaña, no tan dura en las subidas y con recorridos por pistas demasiado cómodas aunque bastante larga.

Cuando pasa mucho tiempo desde que se hace la ruta, ciertamente pierde algo de sentido el hacerlo, pero dado que soy pelín "cuadriculado" para esto quiero ponerme al día, así que me actualizo con una ruta hecha el 13 de noviembre por La Pedriza, una ruta larga que nos llevaría hasta "Las Torres". Aquí el enlace a wikiloc:



Incorporo una novedad en esta entrada que es la de poner la clasificación de la ruta según el método MIDE. Para los que tengáis curiosidad encontraréis toda la información sobre el mismo en: http://www.euromide.info/?cat=4

Vamos que según esto parece que fue una "palicilla". Lo cierto es que sí, que la subida inicial es dura, de las pendientes fuertes que hay que hacer muy ..." poco a poco".

Lo que caracterizó la excursión fue que nos situamos por encima de las nubes, teniendo magníficas vistas de un "mar de nubes". Esta es una de las primeras que hice, en plena subida:


Y otras que creo merecen la pena:

























La "isla" que se ve en la primera foto de la derecha es el Yelmo y lo que se ve en la de debajo es "El dedo de Dios".

En esta situación es evidente que uno entra en contacto con la naturaleza y con uno mismo y comienza a desarrollar las posturas que armonizan este contacto. Para Félix fue muy natural:


Claro, que también tuvimos la oportunidad de estar en contacto con otros elementos de la naturaleza menos "etéreos". He aquí un magnífico ejemplar de "Capra pyrenaica" (cabra montés, vaya).

Una de las cosas que más me gustó de la ruta es el cambio de paisaje que percibes en cuanto llegas a la cumbre; lo que en una vertiente era roca, dura subida sin apenas vegetación se convierte en la otra vertiente en un suave valle de verde pradera.


La bajada fue muy, muy agradable. Paramos a comer en un llano de pradera donde se respiraba una tranquilidad muy especial y donde nuestra única compañía era un gran rebaño de cabras (ellas no estaban tan tranquilas, estaban dirimiendo alguna rencilla o tensión ¿sexual? no resuelta). Aquí estamos todos, en esta pradera ya "comidos" y "descansados".


Por cierto, como muchos sabéis en la montaña se pueden encontrar multitud de "recuerdos" que la gente ha ido colocando. Casi en la cumbre, al poco de pasar Las Torres podréis encontrar una imagen de Jesús y un Nacimiento (que no es de temporada, está todo el año).


En fin, otra magnífica ruta, muy muy recomendable....